Respuesta :

FUNCIONES del H2O: 
- El Agua es el Disolvente Universal. Es otra propiedad del agua, ya que posee gran capacidad para disolver sustancias. Prácticamente disuelve casi todos los cuerpos sólidos. Las plantas se nutren de sustancias minerales que hay en la tierra. Esas sustancias, que son Sales minerales, tienen que ser disueltas antes por el agua para poder entrar en la planta. Lo mismo ocurre en los animales, ya que casi todas las sustancias nutritivas que atraviesan las paredes del Intestino están disueltas en agua. Algunas están suspendidas en el agua. Si el agua no tuviera esa propiedad, la alimentación de los seres vivos no se podría efectuar. El Agua al ser un disolvente, permite el cumplimiento del fenómeno de Ósmosis mediante el cual se cumplen procesos fundamentales en las funciones Digestiva, Respiratoria y Excretora. 
c) Es imprescindible para las Enzimas que provocan y regulan las reacciones químicas que se producen en el organismo. 
d) Ayuda a regular el Calor de los animales 
e) Proporciona flexibilidad a los Tejidos. 
f) Sin agua no podríamos Respirar porque nuestros pulmones, para funcionar, deben estar permanentemente húmedos. 
g) Cuando bebemos, el organismo no sólo se hidrata, sino que repone las sales minerales que pierde al eliminar líquido por la orina, la transpiración y la respiración. Se calcula que por medio de la transpiración y la respiración perdemos hasta cuatro tazas de agua diariamente. 

FUNCIONES de las SALES MINERALES: Son necesarias para la constitución de diferentes estructuras orgánicas y para diversas funciones. Desempeñan un papel importantísimo en el organismo, ya que son necesarios para la elaboración de tejidos, síntesis de hormonas y en la mayor parte de las reacciones químicas en las que intervienen los enzimas. 
- SODIO: regula el reparto de agua en el organismo e interviene en la transmisión del impulso nervioso a los músculos. 
- POTASIO: también actúa de regulador en el balance de agua en el organismo y participa en la contracción del músculo cardíaco. 
- CALCIO: forma parte de los huesos, del tejido conjuntivo y de los músculos. Junto con el potasio y el magnesio, es esencial para una buena circulación de la sangre. 
- FOSFORO: también es un elemento constituyente de la estructuras de los huesos y, en asociación con ciertos lípidos, da lugar a los fosfolípidos, que son componentes indispensables de las membranas celulares y del tejido nervioso. 
- MAGNESIO: imprescindible para la correcta asimilación del calcio y de la vitamina C. Equilibra el sistema nervioso central, es importante para la correcta transmisión de los impulsos nerviosos y aumenta la secreción de bilis (favorece una buena digestión de las grasas y la eliminación de residuos tóxicos). 
- CLORO: favorece el equilibrio ácido-base en el organismo y ayuda al hígado en su función de eliminación de tóxicos. 
- AZUFRE: Está presente en todas las células, especialmente en la piel, uñas, cabellos y cartílagos. Entra en la composición de diversas hormonas (insulina) y vitaminas, neutraliza los tóxicos y ayuda al hígado en la secreción de bilis. 
- HIERRO: es necesario para la producción de hemoglobina, molécula que transporta el oxígeno en el interior de los glóbulos rojos. También es imprescindible en la correcta utilización de las vitaminas del grupo B. 
- FLUOR: previene la caries dental y fortifica los huesos. 
- YODO: indispensable para el buen funcionamiento de la glándula tiroides. Ayuda al crecimiento, mejora la agilidad mental, quema el exceso de grasa y desarrolla correctamente las uñas, cabello, piel y dientes. 
- MANGANESO: activa los enzimas que intervienen en la síntesis de las grasas y participa en el aprovechamiento de las vitaminas C, B1, y H. 
- COBALTO: contribuye en la formación de los glóbulos rojos, ya que forma parte de la vitamina B12 que se puede sintetizar en la flora intestinal. 
- COBRE: es necesario para convertir el hierro almacenado en el organismo en hemoglobina y para asimilar correctamente el de los alimentos. 
- ZINC: interviene en procesos metabólicos como la producción de linfocitos, síntesis de proteínas y formación de insulina. También participa en la síntesis como en la degradación de hidratos de carbono, grasas, proteínas y ácidos nucleicos. 
- SILICIO: indispensable para la asimilación del calcio, la formación de nuevas células y en la nutrición de los tejidos. 
- NIQUEL: es necesario para el buen funcionamiento del páncreas. 
- CROMO: participa en el transporte de proteínas y mejora la diabetes. 
- LITIO: fundamental para la regulación del sistema nervioso central. 
- MOLIBDENO: ayuda a prevenir la anemia y la caries. 
- SELENIO: tiene las mismas propiedades desintoxicantes que el azufre y además es un potente antioxidante, por lo que nos previene del envejecimiento de los tejidos y de ciertos tipos de cáncer.