La luna
Aquella que madruga
Que ilumina sin luz
Que me acompaña
A falta de caricias matutinas
La luna
Del mar, sería la espuma
Por su frágil caricia,
Su cálido gris
Poderío de noche
La luna
Que nunca se esfuma
Sin miedo del sol
Sombra de nadie
Como yo.