Las soluciones son sistemas homogéneos formados básicamente por dos componentes: solvente y soluto. La concentración (relación que existe entre la
cantidad de soluto y la cantidad de solución o de solvente) de las soluciones se puede
expresar de muchas formas distintas, entre ellas destacan las siguientes:
1) La molaridad o concentración molar
Es una medida de
la concentración de un soluto en una disolución, o de alguna especie molecular, ionica,
o atómica que se encuentra en un volumen dado.
Se
traduce como el número de moles por litros de solución, por lo tanto si una
solución contiene un mol de NaCl (58.5 g), en un litro de solución, su
concentración es 1 Molar.
Se calcula con la siguiente fórmula:
M =
moles de soluto / L de solución
2) La molalidad o concentración molal
Se denota con la m
y se define como el número de moles de soluto por kilogramo de solvente.
Se
calcula en función de la siguiente fórmula:
m = Moles de soluto / L
de solvente
3) La
normalidad ó concentración normal
Es el número de pesos equivalentes por litros
de solución, de modo que si una solución contiene un peso equivalente de CaCO3
(100 g), en un litro de solución, su concentración es 1 Normal.
Se calcula de la siguiente manera:
N = equivalente
g de soluto / L de solución